¡ WonderLand !

Sometimes in our lives, we all have a pain. We all have a sorrow. But if we are wise, we know that there's always tomorrow...

Lean on me, when you're not strong. And I'll be your friend. I'll help you carry on. For it won't be long. 'Til I'm gonna need, somebody to lean on...

Please swallow your pride. If I have things you need to borrow. For no one can fill those of your needs. That you don't let show...

So just call on me brother, when you need a hand. We all need somebody to lean on. I just might have a problem that you'd understand. We all need somebody to lean on...

Lean on me, when you're not strong. And I'll be your friend. I'll help you carry on. For it won't be long. 'Til I'm gonna need, somebody to lean on...

If there is a load you have to bear. That you can't carry. I'm right up the road. I'll share you load. If you just call me. Call me... Somebody to lean on...

No sé a ciencia cierta por qué será, pero cuando empiezan las malas rachas, esas que traen solo mala suerte y que parece que van a durar siglos, en seguida por detrás veo venir una luz. A veces pienso que un ser supremo nos pone a prueba. Como para ver qué hacemos frente a esos problemas. Para ver cómo los resolvemos. Y que si nos ve vencidos o casi a punto de caer, nos da una mano para sostenernos y podernos levantar. Y otra solución coherente no encuentro. Creo que debe ser así el ciclo de la vida. Algunas veces nos toca estar arriba de la rueda, en la cima de la gloria. Y otras, por debajo, padeciendo mil dificultades. Pero ahí es cuando asoman esas lucecitas que nos dan mil y una soluciones. Muchas veces son personas que con solo darnos su compañía, aportan esa claridad que necesitamos para salir adelante. No hace falta que sean inseparables ni que sean consejeros casi psicólogos. Con solo estar, dan más que cualquiera que pretenda ayudar. Nos brindan su hombro cuando es necesario desagotar alguna lágrima traviesa que se cuela en nuestros ojos. Y también los que hacen que te agarres la panza de tanto reír y reír. Son los que nos hacen saber que no estamos solos. Que no todo es blanco o negro. Sino que hay matices de mil colores. Los que le dan el sentido a nuestras vidas. Son todos aquellos con los que podemos contar. Los que con solo llamar, estarán sin falta para darte una soga salvadora que te saque de esos enormes agujeros negros que muchas veces terminan siendo producto de nuestra desesperación. Porque todo el tiempo estamos ahogados en un vaso de agua. Turbia, por cierto. Porque no podemos verlos con claridad cuando se acercan. Pero ahí están, al otro lado del cristal, para darnos un flotador cuando nos hundamos en nuestras penas. Ellos son los que hoy me dan las razones para seguir adelante, para sonreir y ser feliz. No hay mal que dure cien años, recita un dicho muy popular. Todo tiene solución, lo sé. El mañana va a ser más soleado si así lo quiero. Solo hay que proponérselo...

 {Gracias Totales}